En 1164 los condes de Biandrate confirmaron la donación al templo de todos sus bienes ad locum ubi Ruspalia dicitur e in circuitu (en Ruspalia y sus alrededores), cerca de San Giusto Canavese. Hay pocas referencias a la casa de los Templarios, probablemente construida gracias a la donación de la familia Biandrate. En 1222, Giacomo de Mellacio, tutor de la casa templaria de Vercelli, fue designado para proteger los intereses de las casas de Vercelli, Novara, Isana, Ruspaglia e Ivrea. El documento se refiere a la casa Ruspaglia como una domus y dedicada a Santa María. Posteriormente, Gabriele, domus tutor Templi de Ruspalia (tutor de la casa de Ruspaglia), participa en el capítulo provincial celebrado en Piacenza en 1271.
Hoy en día queda una pequeña iglesia en Ruspaglia, que pertenecía al hospital y que probablemente fue construida por los Caballeros Templarios. En los archivos hay un rastro de una visita anterior que tuvo lugar en 1768. Este documento nos dice que la iglesia, dedicada a San Giacomo, formaba parte de las recomendaciones de Ivrea. Aquí la dedicación es diferente a la de Santa María en la época de los templarios y probablemente se remonta al período posterior a su entrega a los Caballeros de San Juan. No muy lejos de esta iglesia hay un caserío llamado “La Commenda”, que, según los documentos de los Caballeros de San Juan, pertenecía a la Orden. Debido a la falta de estudios detallados y a una serie de obras y alteraciones posteriores, es imposible establecer si alguna parte de este edificio data de la fase templaria.
